Categoría: Fotografia

  • El Rugido del MiG-29 en Lima – Fotografías desde Las Palmas

    El Rugido del MiG-29 en Lima – Fotografías desde Las Palmas

    Desde niño, los aviones de combate siempre ejercieron sobre mí una mezcla de asombro y respeto. Las formas afiladas, el rugido de los motores, esa sensación de poder contenido… Así que cuando supe que habría una exhibición aérea en la Base Aérea Las Palmas, en Surco, no lo pensé dos veces: tenía que estar ahí, cámara en mano.

    Ese día desfilaron ante mis ojos verdaderas joyas de la aviación militar: Sukhoi Su-25, Mirage 2000, y por supuesto, la estrella de la jornada: el imponente MiG-29 Fulcrum de la Fuerza Aérea del Perú.

    El MiG-29: símbolo de la Guerra Fría en cielos peruanos

    El Mikoyan MiG-29, conocido por la OTAN como “Fulcrum”, fue diseñado en la ex-Unión Soviética en los años 70 como una respuesta directa a los cazas norteamericanos F-15 Eagle y F-16 Fighting Falcon. En plena Guerra Fría, se necesitaba un interceptor veloz, ágil y letal, capaz de mantener la paridad tecnológica en los cielos.

    Su debut operativo fue en 1983, y desde entonces ha sido una de las piezas clave de la aviación de combate rusa. Se caracteriza por sus motores gemelos RD-33, su capacidad de maniobra en combate cerrado (dogfight), y una velocidad máxima que supera los Mach 2.2 (más de 2,400 km/h).

    Perú y el MiG-29: una alianza estratégica

    En Latinoamérica, el Perú es el principal operador del MiG-29. La FAP adquirió inicialmente 18 unidades en la década de 1990, como parte de un proceso de modernización y disuasión estratégica. Algunos fueron comprados directamente a Bielorrusia, y posteriormente se realizó una modernización local para extender su vida útil.

    Hoy en día, los MiG-29 peruanos se distribuyen entre las bases aéreas del norte del país, como Piura y Chiclayo, formando una parte fundamental del poder aéreo nacional. Su presencia ha sido clave para mantener el equilibrio regional, especialmente frente a potenciales amenazas o tensiones fronterizas.

    Mi acercamiento fotográfico: volver al rollo

    En esta exhibición decidí hacer algo diferente. En vez de llevar una cámara digital, opté por lo clásico: mi Nikon F5, una de las mejores cámaras de película de todos los tiempos. La acompañé con un lente Nikkor 28-105 mm, muy versátil para fotografía de eventos y detalles técnicos.

    Usé película Kodak ProImage 100, que ofrece una paleta de color cálida, ideal para capturar el brillo metálico de los cazas bajo el sol limeño. Los negativos los escaneé yo mismo en casa, con un Epson Photo 4490, cuidando cada detalle del grano y la fidelidad del color.

    No buscaba simplemente retratar aviones, sino capturar ese “algo más”: el peso histórico, la presencia imponente en tierra, los reflejos sobre el fuselaje, el contraste con el cielo.


    Abajo encontrarás la galería con las tomas que hice ese día. Algunas muestran detalles de las toberas, otras el perfil completo de la aeronave lista para rugir. Todas con el objetivo de rendir homenaje visual a uno de los cazas más emblemáticos del mundo, y a la pasión por la aviación que muchos compartimos desde la infancia.

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  • Gaviotas en Vuelo: Probando mi Nikon D2x con un Lente Largo en Playa El Paraíso

    Gaviotas en Vuelo: Probando mi Nikon D2x con un Lente Largo en Playa El Paraíso

     

    A veces uno sale a probar equipo. Sin pretensiones, sin modelos, sin luces. Solo el mar, el cielo y unas gaviotas que no sabían que estaban a punto de ser protagonistas de una pequeña secuencia fotográfica.

    Elegí un lugar poco conocido pero hermoso: Playa El Paraíso, al norte de Lima, cerca de Huacho. Y llevé conmigo un lente que, sinceramente, no uso mucho: el Nikon AF Nikkor 70-300mm f/4-5.6 G, montado sobre mi Nikon D2x.

    El equipo: un zoom económico en un cuerpo profesional

    La D2x es una bestia. Robusta, confiable, y con ese sensor CMOS de 12.4 MP en formato DX, que entrega colores que me siguen enamorando. Pero el lente… bueno, el 70-300 G no es el mejor compañero para acción rápida.

    A diferencia de mi Tamron 70-300mm con anillo de abertura, este Nikkor carece de ese control manual y se siente más limitado. Además, el enfoque no es lo más rápido del mundo. Comparado con un 80-200mm f/2.8 ED, parece caminar mientras el otro vuela.

    Aun así, quise ver qué tan lejos podía llevarlo.

    Preparando la escena: paciencia y distancia

    No soy fotógrafo de naturaleza en el sentido clásico. Pero sí tengo algo claro: los animales no posan si los apuras. Así que lo primero fue mantener la distancia. Me acerqué con calma, sin movimientos bruscos, hasta que encontré una posición cómoda.

    Me senté. Respiré. Y esperé.
    Las gaviotas no tardaron en volver a confiar.

    Usé ISO 400, velocidades altas para congelar el vuelo, y traté de mantener el lente en 300mm, lo que con el factor de recorte del DX equivale a unos 450mm reales. A esa distancia, cada aleteo parecía una coreografía.

    El lugar: Playa El Paraíso, su nombre lo dice todo

    A unos 145 km al norte de Lima, saliendo por la Panamericana, hay una entrada sin señalización —escondida, como un secreto bien guardado— que lleva a esta playa. Es un camino de tierra, un poco accidentado, pero cuando llegas… la vista compensa todo.

    La playa es limpia, tranquila, sin multitudes. Un paraíso de verdad. Ideal para ir a pensar, a leer, o en mi caso, a probar lentes olvidados.

    No hay tiendas, ni restaurantes. Solo un vendedor ambulante que aparece con cervezas y helados hasta que cae el sol. Después de eso, quedas tú, el mar, y el sonido de las aves.

    Lecciones para la próxima

    El 70-300 G no es ideal para tomas de acción. Eso me quedó claro. Pero con algo de técnica y paciencia, se pueden lograr resultados decentes. Para la próxima, pienso:

    • Cerrar más el diafragma: trabajar con f/5.6 o f/8 para mejorar nitidez.
    • Anticipar el vuelo: disparar justo antes del movimiento, no durante.
    • Llevar mi 80-200mm f/2.8 si quiero mejores tiempos de enfoque.

    Pero también entendí que a veces no se trata del equipo, sino del momento.


    Detalles técnicos

    • Cámara: Nikon D2x
    • Lente: Nikon AF 70-300mm f/4-5.6 G
    • Modo: Prioridad de velocidad / Manual
    • ISO: 400
    • Velocidades: altas para congelar vuelo
    • Distancia focal: 300mm (equivalente a 450mm en DX)
    Danza de gaviotas - Bandada, Huacho, Peru
    Danza de gaviotas - Buscando el alimento
    Danza de gaviotas - Acelerando
    Danza de gaviotas - Rafaga
    Danza de gaviotas - Cambiando el curso
    Danza de gaviotas - Al ataque
    Danza de gaviotas - En compañia
    Danza de gaviotas - Sobrevolando
  • Entrada al mas alla

    Una de mis tomas favoritas, se trata de uno de los pasajes, dentro de la pirámide de Cholula, en México. Esta toma la hice en el 2009, en mi primera visita a este hermoso pais.

    Técnicamente hablando es una toma a mano alzada, a ISO 1600, con mi cámara Nikon D80. La toma no tiene mucho de arreglos, así es el lugar, es una pirámide con unos pasajes angostos e intrincados, seria muy fácil perderse dentro del mismo. Definitivamente volvería a ir y hacer nuevas tomas.

    Entrada al mas alla
    Entrada al mas alla, uno de los pasajes dentro de la piramide de Cholula, en Puebla Mexico

  • Reduciendo el tamano de las imagenes

    Hay casos en que debemos reducir el tamano de nuestras imagenes, para que estas sean publicadas en un documento o en internet.

    Debido a que las cámaras de hoy tienen muchos megapixels, se hace innecesario subir, incrustar, agregar una imagen con tanta resolución. Para eso tenemos una herramienta en Photoshop, que nos permite reducir fácilmente. Uno de los tantos casos que le doy es cuando subo imagenes a mi banco de imagenes. En donde el tiempo y el ancho de banda, de mi conexion a internet, son la mayor limitante.

    Es tan fácil, como cargar el photoshop, ir a:

    File (Archivo) > Save for Web & Devices ( Guardar para Web y Dispositivos)

    Reduciendo el tamano de las imagenes
    Reduciendo el tamano de las imagenes

     

    Reduciendo el tamano de las imagenes

     

  • Adios Nikon D100, hola Nikon D2x

    Adios Nikon D100, hola Nikon D2x

    Un tributo a una cámara que me dio más de lo que esperaba

    Hay cámaras que pasan por nuestras manos sin dejar huella, y hay otras que simplemente se quedan con nosotros, incluso cuando ya no están. La Nikon D100 pertenece a ese segundo grupo.

    La vendí en marzo de 2011, a un precio justo, casi simbólico, a un buen amigo fotógrafo que sé que la está usando con cariño y responsabilidad. Me dio gusto que quedara en buenas manos, pero no negaré que sentí un pequeño vacío al dejarla ir. Esa cámara me dio muchas satisfacciones, y más de una foto que hoy sigo considerando entre mis favoritas.

    ¿Una cámara olvidada? No para mí.

    Siempre me llamó la atención cómo algunos fotógrafos, como Ken Rockwell, no le daban tanto crédito a la D100. Y aunque lo respeto mucho, esta vez no coincidimos. La D100 puede que solo tenga 6 megapíxeles, pero eso no le impide ser una gran cámara. De hecho, creo que en muchos aspectos me gustaba más que mi Nikon D80.

    Tenía cuerpo, peso, presencia. Su construcción era sólida, inspiraba confianza, y el ruido en las imágenes era menor, especialmente en ISOs bajos. Le instalé el último firmware oficial de Nikon y siempre se comportó con una fiabilidad ejemplar. Puede sonar sentimental, pero sí: me encantaba esa cámara.

    Aquí dejo una pequeña galería de imágenes tomadas con ella, como homenaje a lo mucho que me dio.


    Bienvenida, Nikon D2x

    Dicen que para dar un paso adelante, a veces hay que dejar algo atrás. Así fue como vendí mi D100 y la usé como parte de pago para una cámara que siempre había querido tener entre manos: la Nikon D2x.

    Esta cámara ya es otra historia. Está en otra liga. Aunque no he tenido muchas oportunidades de salir a fotografiar con ella, en los pocos disparos que he hecho ya se siente su poder, su rapidez, su precisión. Es una herramienta seria, hecha para durar, pensada para profesionales… y para entusiastas testarudos como yo.

    Pronto compartiré algunas imágenes tomadas con esta nueva compañera. Estoy seguro de que nos vamos a llevar muy bien.


    ¿Tú también tuviste una Nikon D100 o una D2x? ¿Qué recuerdos tienes de ellas? Cuéntamelo en los comentarios o en redes.