Hay computadoras que simplemente se niegan a envejecer. La iMac de 27 pulgadas 5K del 2017 es una de ellas. Puede tener ya algunos años encima, pero con un par de ajustes estratégicos, vuelve a la vida con una potencia que sorprende.
En mi caso, decidí renovarla por completo: le instalé un SSD de alto rendimiento y amplié la memoria RAM a 24 GB. El resultado fue tan bueno que terminó superando a varios equipos Windows más recientes, tanto en rendimiento como en estabilidad.
Diseño que sigue robando miradas
Apple encontró el equilibrio perfecto con el diseño de esta generación. El cuerpo de aluminio, el perfil delgado y esa pantalla Retina 5K de 27 pulgadas siguen siendo un espectáculo visual incluso en 2025.
La fidelidad de color, el brillo y el nivel de detalle hacen que editar fotografías sea un verdadero placer.
Aun sin el nuevo estilo minimalista de los modelos M1 o M3, esta iMac transmite elegancia y solidez; es el tipo de equipo que no solo se usa, sino que también luce bien en el escritorio.
Especificaciones técnicas de la iMac 27” 5K (2017)
| Componente | Detalle |
| Pantalla | Retina 5K de 27 pulgadas (5120 x 2880 pixeles) con amplia gama de color P3 |
| Procesador | Intel Core i5 de 7ª generacion (4 nucleos, 3.4 GHz base / hasta 3.8 GHz Turbo Boost) |
| Memoria RAM | Originalmente 8 GB DDR4 (ampliada a 24 GB en esta unidad) |
| Almacenamiento | Disco Fusion Drive reemplazado por SSD de 1 TB |
| Gráficos | AMD Radeon Pro 580 con 8 GB de VRAM GDDR5 |
| Puertos | 4 x USB 3.0, 2 x Thunderbolt 3 (USB-C), SDXC, Ethernet Gigabit, Jack 3.5 mm |
| Cámara | FaceTime HD 720p |
| Audio | Altavoces estéreo integrados de alta fidelidad y micrófono dual |
| Sistema operativo | macOS Sonoma (totalmente compatible y fluido) |
| Año de lanzamiento | 2017 |
Estas especificaciones la convierten en una máquina perfectamente capaz para trabajo creativo, fotografía profesional, edición de video y transmisiones en vivo.
Los upgrades que marcaron la diferencia
De fábrica, el Fusion Drive era el cuello de botella. Con el cambio a SSD y la ampliación de RAM, la transformación fue total:
- Arranque en 12 segundos (antes casi 1 minuto).
- Aplicaciones como Lightroom, Photoshop e Illustrator abren al instante.
- Multitarea fluida, incluso con varios programas Adobe y Streamyard ejecutándose al mismo tiempo.
De hecho, la mayoría de las fotografías que ves publicadas en este blog fueron editadas en esta misma iMac. Y no solo eso: también la he usado para transmitir en vivo con Streamyard, conectando cámaras, micrófonos y overlays sin caídas de rendimiento ni sobrecalentamientos.
Radeon Pro 580: una GPU que sigue dando pelea
La Radeon Pro 580 fue una de las mejores GPUs dedicadas que Apple integró en una iMac.
En 2025 sigue siendo más que suficiente para:
- Edición de video 4K.
- Procesamiento de efectos en Photoshop o After Effects.
- Renders en Illustrator o programas de diseño vectorial.
En comparación con muchas GPUs integradas en laptops Windows modernas, esta Radeon ofrece una experiencia más estable, silenciosa y visualmente superior.
Rendimiento real frente a PCs Windows
He probado esta iMac lado a lado con equipos Windows de escritorio (procesadores i7 y Ryzen 5) y la diferencia es clara.
Mientras los PCs suelen perder fluidez al abrir múltiples apps creativas, macOS maneja mejor la memoria y mantiene una experiencia estable incluso bajo carga.
El resultado es una sensación de trabajo más ágil, sin microcortes ni congelamientos.
En resumen: la optimización del sistema operativo hace que la iMac 2017 siga sintiéndose más rápida que muchas PCs modernas con hardware más reciente.
Mantenimiento: un pequeño sacrificio que vale la pena
Actualizar una iMac no es tan simple como en una PC. Requiere abrir cuidadosamente la pantalla y reemplazar los adhesivos, pero una vez hecho, el resultado vale cada minuto.
Si prefieres no hacerlo tú mismo, cualquier servicio técnico especializado en Apple puede encargarse sin riesgo.
¿Vale la pena en 2025?
Definitivamente sí.
Una iMac 27” de 2017 con SSD y 24 GB de RAM sigue siendo una máquina totalmente válida para fotografía, video, diseño y streaming profesional.
Por una fracción del precio de un equipo nuevo, obtienes un sistema potente, estable y con una pantalla 5K que aún deja en ridículo a muchos monitores actuales.
Conclusión: un clásico que se resiste a jubilarse
La iMac 27” 5K (2017) demuestra que lo duradero también puede ser moderno.
Con unos cuantos upgrades, sigue siendo una herramienta de trabajo profesional, rápida, silenciosa y visualmente impecable.
Para quienes vivimos de la creatividad visual —ya sea editando fotos, diseñando o transmitiendo en vivo— sigue siendo una compañera fiel y perfectamente vigente.